AIMEE: Prendas para sentirse amada

Conversamos con Antonella Porporato, la diseñadora de esta marca local que reivindica el amor, lo hecho a mano y el diseño exclusivo.

Hace seis años atrás, Antonella Porporato se recibió de diseñadora de indumentaria en la escuela de Roberto Piazza en Córdoba, una carrera que se dio cuenta que era para ella cuando dejó el cursillo de Ciencias Económicas. Esa decisión tuvo que ver no sólo con su afinidad con el diseño, sino también con su conexión con su abuela, con comparte recuerdos mientras cosían y tejían.

Así, de esa pasión nació Aimee, una marca de indumentaria femenina cuyo eslogan es “hecho con amor”, reflejando esos momentos de unión y cariño. “Aimee significa amada en francés. Que la mujer se sienta amada, ya sea probándose la ropa, simplemente mirándola o luciéndola”, comenta la diseñadora, que eligió el nombre durante un momento duro de su vida, en el cual se sentía plenamente amada, pensando en la búsqueda de paz y la identificación.

Con distintas tipologías y con la exclusividad del diseño único como característica principal, esta marca cuenta con un estilo versátil pero que encuentra reminiscencias en el “boho chic”. El nivel de detalles incluso ha llevado que muchas personas que ingresan al local, ubicado en barrio General Paz, la comparen con Rapsodia, la posicionada marca nacional.

- ¿En qué consisten tus colecciones?

No hago colecciones, sino que cada dos meses lanzo una colección capsulas con una específica inspiración. No hago dos prendas iguales, aunque tengo moldería base. Además, tengo un mix de productos, los cuales algunos se tercerizan, y traigo lo más básico desde Buenos Aires con un proveedor que hasta me personaliza algunas prendas. Ahora implementé también la customización: todo a mano, artesanalmente, en prendas personales de las clientas.

- ¿Dónde buscas inspiración en el momento que realizás cada cápsula?

Me inspiro mucho en mis estados de ánimo. Me fijo siempre en lo que me pide el cliente, pero todo lo que hago es desde el corazón, ya que lance mi marca en el momento en que me encontraba conmigo misma y para hacer lo que a mí me gusta, todo hecho a pulmón. Algunas capsulas son historias que me pasaron, otras, como “Raíces“, significan no olvidarse de donde venimos y quienes somos. Mi primera capsula, una de las más importantes, se llamó “Viaje Interior“, que se basó en mi descubrimiento y conjunto de sensaciones al hacerlo.

- En tu última colección utilizaste a algunas de tus clientas como modelos. ¿A qué se debe la idea? ¿Qué quisiste transmitir?

Fue la colección de agosto, la de amistad. Busqué a mis clientas distintas entre sí, con todo tipo de cuerpos, actitudes y personalidades. Y lo que quise transmitir es que en Aimee hay ropa para cada tipo de mujer. Lo que busco es tener un abanico de edades.

- ¿Sentís que cumplís con tu objetivo?

Sí, siento que la mujer entra y ve algo distinto, tanto en la estética como en las prendas. La mayoría de las clientas vuelven. Hasta construimos amistades entre ellas.

- ¿Te resultó difícil insertarte en el mercado de la moda?

Insertarse en el mercado es difícil por una cuestión que Córdoba es básica. Seguimos a la manada, usamos todo lo que el otro usa. Es súper difícil poner una marca. La gente, al estar así como muy en la manada, no te valora muchas cosas. Tenés que captar bien justo al cliente que realmente valore el trabajo que vos haces atrás de cada prenda.

- ¿En algún aspecto seguís la moda que se ve afuera?

Tengo cazadores de tendencias que sigo en los blogs. Mi viaje de luna de miel me ayudó muchísimo y de algunos de los lugares que visité traje géneros y sigo utilizándolos. Así que quisiéramos seguir viajando para traer más cosas que sumen

a Aimee.

- ¿Cómo te ves en un futuro con la marca? Quiero tener un atelier, pero de ropa casual. Y además hago prendas únicas sin replicas. Quiero ir en silencio, y el ruido viene solo.

Por Fátima Carrizo.

Fotos: Facebook/aimee